La crisis saca lo mejor o lo peor de nosotros. Hoy más que nunca la mayoría de las personas andan buscando líderes que los ayuden a seguir adelante. Nosotros podemos ser esos líderes. Pero si nosotros también estamos paralizados es un problema grave.
Se puede tener miedo. No tenemos todas las respuestas, no tenemos el control, eso causa miedo. Como líderes no es necesario que tengamos todas las respuestas sino un plan de acción inmediato y moldeable ante las variables. Si esto no me funciona entonces hago esto otro. No dejemos que el miedo nos paralice o nos apresure, hagamos conforme a lo que Dios nos dice pasando tiempo en oración, El si tiene todas las respuestas.
Agreguemos valor, no temor. De sobra hay personas calamitosas, todo esta mal, esto va de mal en peor, nada volverá a ser igual. Es lo mismo que han dicho en todas las crisis y aun estamos aquí. No quiero minimizar es tamaño de esta situación, la verdad que nuestra generación no había vivido algo como esto, pero como dice la frase “esto también pasará” pero el Señor se ha mantenido fiel en todas las crisis anteriores y creo que se mantendrá fiel en esta. Así que confía vienen tiempos mejores, Si tu confías y lo crees también lo harán los que están a tu alrededor, la confianza es algo muy difícil de esconder.
Ve en las esquinas. Hace tiempo leía un libro de emprendimiento donde describe a los líderes como aquellos que ven en las esquinas. Te lo explico. Cuando se trata de oportunidades la mayoría de las personas ve en una sola dirección, un líder voltea la cabeza y ve en varias direcciones tratando de captar el panorama completo. Por ejemplo y hagamos el ejercicio, tratemos de ver el lado positivo de esta situación, qué necesidades genera en la vida de nuestros adolescentes que no hemos visto aún, un 73% de los adolescentes considera que se ha acercado a sus padres en el confinamiento, pero ¿qué del 27% que no la está pasando bien? ¿Por qué? ¿Hay una oportunidad ahí? Seamos líderes resilientes, esta circunstancia nos tiene que enseñar a nosotros primero. Demos ejemplo de buenas decisiones y de liderazgo firme, transformador y de valor.
