No hay nada más viral que el pesimismo. Es increíble el poder de propagación que tiene esta enfermedad mental. Tiene que ver más con la mente que con las circunstancias que pasas.
Dos personas pueden tener las mismas dificultades pero según su actitud hacia ellas las afrontarán de formas diferentes y una la superará más rápido que otra.
Los principales focos de infección son las noticias, a lo largo de toda Latinoamérica están sucediendo tragedias, violencia, catástrofes las cuales vemos en el noticiero de la mañana. Quiere decir que desde muy temprano nos colocamos nuestra dosis de pesimismo y eso hace de nuestro día una maravilla “estoy siendo sarcástico”.
Y si nos ves noticia, esa vecina o vecino que esta “actualizado” con todos los pormenores del dólar, la sociedad, la política, la crisis, se encarga de darte los buenos días con “vecino se enteró que…”
Es bueno estar informado, pero la fuente de esa información importa más.
1 de Pedro 5:7 “echando toda nuestra ansiedad sobre El, porque El tiene cuidado de nosotros”
Salmos 9:10 “en ti confiaran los que conocen tu nombre, por cuanto tu Jehová, no desamparaste a los que te buscaron”
Filipenses 4:6
6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
Estas si son buenas noticias para empezar tu día. Si las haces tuyas y cambias tu actitud creyendo lo que dice Dios para ti, te aseguró que tu vida cambia, tu día brilla más y las cosas pasarán, yo lo he vivido.
Soy una persona normal, no soy el tipo más optimista y espiritual del mundo, pero, si creo algo. Si Dios lo dijo El lo hará. Así que creo, y ya.
Jim Rohn era un hombre que inspiró a millones de personas y aún sigue haciéndolo con sus temas de liderazgo, finanzas y actitud. En esta ocasión te comparto su forma de ver las dificultades.
